|
Costó, pero ya está aquí: el verano, señoras y señores. De repente. Y justo a tiempo para el arranque de la temporada de conciertos al aire libre en Madrid. El festival Noches del Botánico, heredero de las actuaciones estivales en el Palacio del Conde Duque y en la Casa de Campo, arrancó este jueves con Elvis Costello y Seu Jorge, primera de una serie de actuaciones en el Jardín Botánico de la Universidad Complutense que este año contará también con la presencia de Kraftwerk (sábado 23 de junio), Serrat (del martes 26 al jueves 28) y David Byrne (martes 10 de julio) entre otros.
Huele a gloria, Venus y la Luna brillan y sale Seu Jorge con gorro y mono de marinero, como en la película de Wes Anderson Life aquatic. Casi 15 años después, el cantante brasileño recupera las canciones de aquel filme, versiones en portugués de los clásicos de Bowie, como homenaje al músico fallecido en 2016. 'Ziggy Stardust', 'Changes', 'Oh! You pretty things' y 'Rebel Rebel' suenan a voz y guitarra antes de que Jorge cuente la historia del rodaje, cómo estaba jugando a la Playstation cuando su mujer le avisó de que querían que hiciese una película. Y cómo, aún sin ser un motivado de Bowie, dijo que para adelante. Pone también la voz de Wes Anderson, aunque ficcionando su tono, más viril y decidido que en la realidad.
'Rock'n roll suicide', 'Starman' (aquí 'Astronauta de mármol') y 'Lady Stardust' quedan redondas en versión brasileña, aunque 'Space Oddity' emociona más en la versión de los Hermanos Calatrava. Para cerrar, una espectacular 'Life on Mars' antes de que salga Elvis Costello como una moto, con un Steve Nieve sacando la clave más 'soulera' a los teclados y dos hermosas coristas subiendo la temperatura. Si en su anterior visita se presentó él sólo y repasando su biografía, esta vez lo hizo a todo gas.
Aunque a veces la fórmula caiga en lo Santana (el último Santana, es decir), llegan 'Less than zero' (como el libro de Bret Easton Ellis) y 'Tears before bedtime' como un pepino 'blues'. Otro no querer, 'I don't want to go to (Chelsea)' queda más caribeña. Elvis será viejo y feo, pero se las sabe todas, del pop a la new wave, pasando por el jazz. Precisamente 'jazzera' sonó 'You Shouldn't look at me that way', tras 'Watching the detectives'.
Entre el público, Ana Belén, Coque Malla, Juan Aguirre de Amaral y el escritor Julio Llamazares. También músicos famosos en el repertorio de Elvis, de sus colaboraciones con Burt Bacharach ('God gave me strength') y de homenajes a Allen Toussaint, "un buen amigo", de quien recordó que murió en Madrid. Pero fue en las coordenadas 'ochenteras' donde mejor se bregó Declan Patrick McManus, como 'Everyday I write the book'. 'Pump it up', con su soul con zapatos de Frankenstein, abrió camino a los bises, con 'Allison', interpretada por Elvis él solo a su guitarra y las coristas escoltándolo heteropatriarcalmente. 'Accidents will happen', solo al piano', relajó el ambiente para 'She', la versión del clásico de Aznavour, muy moñas, pero muy bonita. Otro recuerdo a un cantante francés, Johnny Hallyday, marcó 'Adieu Paris', cerrada con gritos de "Johnny Johnny". 'Waiting for the end of the world' y 'Pay it back' entre palmas cerraron el primer día bueno del año.
|
