Sin duda, hay apellidos que marcan. Y llamarse MacManus debe de ser uno de ellos. Si a esto se añade el cambiar el Declan Patrick original por un Elvis, parece que cualquier excentridad está permitida. O serán cosas de quien mira la vida, los pentagramas y las cuerdas de su guitarra Fender detrás de unas gafas como las del inmortal Buddy Holly.
Este hombre, quinta del 54, es Elvis Costello, y antes de rockero de pro fue oficinista y cumplido padre de familia, hasta que la discográfica Stiff e cruzara, para fortuna de los aficionados, en su camino. Desde entonces, el señor Costello ha desarrollado una carrera con un buen puñado de éxitos tanto de critics canto de público. Es pájaro inquieto y se ha posado en bastantes estilos, del pub-rock al country, las versiones, un toquecito de jazz. Pero ahora ha rizado el rizo. Porque el londinense ha sugerido a sus seguidores en su web (http://wwwelviscostello.com/) que no se compren su nuevo disco.
"The Return Of The Spectacular Spinning Songbook", debido a su elevado precio: 232 euros. Vamos, que el ejército de Oliver vuelve a
dar guerra.
No contento con eso. Elvis comenta que dicho precio debe ser "un error de impresión o una sátira"y que la gente haria mejor comprándose, el ejemplo no es malo, un disco de Louis Armstrong. Y no uno cualquiera, sino "Ambassador Of Jazz", una caja con diez álbumes remasterizados, al precio de 112 euros. "Es algo francamente mejor", subraya Elvis.
El álbum de Costello consiste en tres CD grabados durante una actuación en Estados Unidos a principios de este año, en una edición limitada de lujo que viene acompañada por un libro de pasta dura y hasta un autógrafo del músico.
En el comunicado, Elvis Costello anade que "todos nuestros intentos de que se revise esa cifra han sido infructuosos, con lo que estamos adoptando medidas poco habituales. Y, finalmente, por sí sus fans no se hablan enterado, les indica que «si quieren escucharlo
esperen al Año Nuevo, y entonces tendrán a su disposición un lanzamiento musical a mejor precio".
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